Él era la última defensa de su mundo caótico, sombrío y oscuro. Frente a un universo frío y aún más tenebroso que el suyo. Él mismo era la mejor arma, su destreza en todo tipo de artes de guerra le hacía el candidato idóneo para la defensa de su universo.
Se preparaba una ofensiva para invadir su mundo, pero él no se lo iba a poner nada fácil. Lucharía hasta la extenuación, para proteger a su mundo y sus habitantes.
M. D. Alvarez
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