miércoles, 13 de marzo de 2024

Aura pura.

Su aura era negra como el azabache, pero siempre cabía la posibilidad de disiparla de forma pacífica.

A sus respuestas violentas, yo le respondía con mi resistencia pacífica, así hasta conseguir que su aura negra comenzara a variar su tonalidad.

Buena era yo para cambiar las auras más lúgubres y oscuras, ya que en mi vida pasada había sido Mahatma Gandhi y gozaba de una paz interior a prueba de bombas. Y a prueba de las auras más oscuras y funestas.

Me había encontrado con las auras más dañinas de todas y las vencí con mi resistencia pacífica.
M D Alvarez 

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