miércoles, 28 de febrero de 2024

Te vi partir.

Te vi partir, fulgurante y brillante, como un resplandor que se desvanece en la distancia. El aire vibraba con la energía de tu ausencia, y el mundo parecía más pequeño sin ti.

Después de tu partida, quedamos solos, desangelados. Nuestros corazones, como hojas secas, se balanceaban entre el odio y el amor. ¿Cómo podíamos sentir ambas cosas al mismo tiempo? Pero lo sabíamos: hay algo más al otro lado.

Allí, al otro lado, donde las estrellas se entrelazan y los suspiros se convierten en constelaciones, estás tú. Aguardándonos con tu gran sonrisa, como un faro en la noche. Tu amor, inmenso como el universo, nos envuelve y nos sostiene.
M D Alvarez 


No hay comentarios:

Publicar un comentario