Al final, una puerta de madera tallada reveló una biblioteca olvidada, llena de libros antiguos y pergaminos. Entre ellos, un diario narraba la vida de una monja que había vivido allí siglos atrás, guardando secretos de alquimia y sabiduría ancestral.
Las obras del convento habían desenterrado un tesoro invaluable.
M. D. Álvarez
No hay comentarios:
Publicar un comentario